Ica: Experiencia de vino, pisco y buggy en las dunas
Un viaje de sabor y aventura en el desierto
Un día completo lleno de momentos inolvidables: primero degustaciones de vino y pisco, luego adrenalina con buggy y sandboard en Huacachina.
Descripción de la experiencia
La recogida es a las 11:00 a. m. en Ica o Huacachina – ¡y comienza la aventura! Entre las 12:00 y las 13:30 se visitan primero una hacienda industrial como Tacama o Vista Alegre, y luego la bodega artesanal El Arrabal. Incluye degustaciones de piscos, vinos y pisco creams. A las 14:30 h disfrutarás de un almuerzo relajado en un restaurante vitivinícola.
A partir de las 15:30 h llega la parte aventurera en el desierto de Huacachina: paseo en buggy por las dunas, práctica de sandboard y fotos espectaculares hasta las 18:00 h, antes de regresar.
Puntos destacados
- Tour enológica en Tacama o Vista Alegre
- Degustación artesanal de pisco en El Arrabal
- Almuerzo típico en restaurante de bodega
- Paseo en buggy y sandboard en Huacachina
- Grupo reducido, incluye traslados y entradas
¿Para quién es ideal?
- Amantes del sabor y la adrenalina (30–65 años)
- Viajeros que desean combinar cultura y aventura
- Perfecto para un día completo desde Ica
Información importante
- Duración: aprox. 7 horas (11:00–18:00)
- Idiomas: inglés y español
- Incluye: traslados, guía, degustaciones, buggy, sandboard, almuerzo
- Entradas: Hacienda Tacama S/25, tasa Huacachina S/3.60 (recargo en feriados en Tacama)
- Llevar: protector solar, gafas de sol, agua, ropa cómoda
- Cancelación: gratuita hasta 24 h antes
Valoración
La experiencia recibe entre 4.3 y 4.5 de 5 estrellas (GetYourGuide & Viator), con elogios especiales para la calidad de las degustaciones y la diversión en el buggy. Un visitante comenta:
«El tour de vinos fue muy informativo… el paseo en buggy una aventura emocionante… ¡hacer sandboard fue genial!»
Conclusión
Un día perfecto entre sabor y aventura: catas de vinos y piscos durante el día, emoción en las dunas por la tarde. Un programa equilibrado que combina cultura, gastronomía y adrenalina – imprescindible para quienes visitan Ica con espíritu versátil.