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Sitio arqueológico de Pitumarka y Pukara – ciudad de terrazas sobre la laguna Allpiccota

Resumen: asentamiento altoandino a 4.008 metros

El sitio arqueológico de Pitumarka (a menudo también escrito Pitumarca) se encuentra en el distrito de Ayapata, provincia de Carabaya, región Puno. A unos 4.008 m s. n. m. se eleva un promontorio rocoso sobre la laguna Allpiccota, rodeado de otras lagunas altoandinas como Qañuccota y de un espectacular paisaje andino. El conjunto se extiende sobre aproximadamente 3,7 hectáreas y reúne barrios residenciales, áreas ceremoniales, terrazas agrícolas, arte rupestre y una necrópolis asociada, conocida como Pukara.

Quien visita Pitumarka descubre una ciudad altoandina compacta, cuyos caminos, sectores y detalles arquitectónicos siguen siendo claramente legibles hoy en día: un lugar ideal para conocer el mundo de las sociedades prehispánicas en el norte de Carabaya.

Ubicación, paisaje y arte rupestre

El acceso al sitio se realiza mediante un ascenso desde la comunidad de Ccochahuma, pasando por la laguna Qañuccota. Más arriba se abre una pequeña planicie altoandina, en cuyo centro se levanta un destacado afloramiento rocoso. Al pie de esta formación se encuentra la laguna Allpiccota, mientras que en la parte superior del peñón se extiende el asentamiento de Pitumarka.

En las paredes rocosas inferiores de la ladera sobre la que se asienta la meseta del poblado se han documentado pinturas rupestres:

• Realizadas en pigmentos rojo claro y anaranjado.
• Representaciones de camélidos: probablemente llamas, alpacas o guanacos.
• Cruces, que apuntan a intervenciones posteriores, posiblemente de época colonial o de carácter sincrético.

A través de una escalera de piedra empedrada se llega a la zona principal de ingreso: un pasadizo de unos 1,70 m de ancho con jambas de hasta 2 m de grosor que marca la transición entre el paisaje rocoso natural y el asentamiento construido.

Plano urbano y sectores de Pitumarka

Pitumarka impresiona por un sistema de calles y sectores claramente estructurado. Una calle principal recorre la ciudad de sur a norte y conecta varias áreas entre sí:

• La calle principal comienza en el sur, en el sector A, y continúa hacia los sectores C y D.
• A partir de allí se ramifica en tres brazos laterales que conducen a otros sectores.
• Pequeños callejones y pasadizos conectan recintos, terrazas y patios interiores.

En total se han identificado siete sectores (A–G), que representan funciones y niveles sociales distintos.

Sector A – Acceso y área ceremonial

El sector A se ubica en el extremo sur del asentamiento y constituye el ingreso principal:

• Forma: patio cuadrado con una superficie de unos 333 m².
• Arquitectura: plataformas laterales, muros cuidadosamente labrados y, en la parte posterior, recintos más pequeños con bancas y plataformas bajas.
• Función: por su ubicación y calidad arquitectónica, el sector A se interpreta como un espacio público-ceremonial que al mismo tiempo permitía controlar el acceso al área del asentamiento.

Sector B – Residencias de la élite

Al norte del sector A se extiende el sector B, un barrio residencial claramente definido:

• Construcciones: grandes recintos rectangulares con aproximadamente 11 m² de superficie interior.
• Disposición: ordenados a lo largo de la calle principal, con distancias regulares y muros bien ejecutados.
• Hidráulica: un canal prehispánico atraviesa el sector y evidencia el manejo planificado del agua.
• Interpretación: por la organización del trazado y el refinamiento arquitectónico, se considera que estos edificios fueron residencias de la élite local.

Sector C – Puntos más altos del asentamiento

El sector C comprende los dos puntos más elevados de la ciudad. En estas prominencias se observan:

• Recintos rectangulares adaptados a la forma del terreno.
• Posibles funciones representativas o rituales, debido a su emplazamiento expuesto.

Sector D – Área residencial de estratos medios

Por debajo del sector C, en el lado oriental del asentamiento, se sitúa el sector D:

• Construcciones: recintos rectangulares, pero con una disposición menos ordenada, en parte muy próximos entre sí.
• Accesos: callejones angostos y sinuosos que conducen a las viviendas.
• Interpretación: probablemente un barrio residencial de un estrato social inferior al de la élite del sector B.

Sector E – Filas de recintos habitacionales

El sector E está formado por seis recintos rectangulares que:

• Se disponen en una fila irregular, uno al lado del otro.
• Están separados solo por delgados muros divisores.
• Se complementan con un séptimo recinto vinculado a un patio.

Este sector muestra una estructura residencial muy densa, organizada en torno a patios y espacios comunes.

Sector F – Zona de terrazas inferiores

El sector F se encuentra sobre una terraza en el extremo norte del asentamiento, alrededor de 10 m por debajo del sector E:

• Construcciones: tres a cuatro recintos rectangulares muy destruidos.
• Acceso: presumiblemente desde el nivel más bajo del terreno, no desde arriba; no se ha identificado acceso directo desde los sectores superiores.

Este sector podría haber albergado construcciones periféricas o estructuras funcionales, como almacenes o áreas de trabajo.

Sector G – Zona baja y necrópolis de Pukara

El sector G se sitúa fuera del núcleo compacto de la ciudad y comprende:

• Un conjunto de recintos en la parte baja y occidental del asentamiento, directamente al este de la laguna Allpiccota.
• Tanto recintos pequeños como estructuras mayores tipo corral, que habrían servido como espacios para el ganado.

Desde aquí se observa directamente el sitio arqueológico de Pukara, una necrópolis con chullpas circulares de unos 2 m de diámetro en un estado de conservación relativamente bueno. Pukara funcionó como lugar de entierro de los habitantes de Pitumarka y añade una notable dimensión funeraria al conjunto.

Experiencia natural: flora, fauna y avifauna

Pitumarka y Pukara se sitúan en una típica zona altoandina, rica en especies de flora y fauna. Para los visitantes interesados en la naturaleza, vale la pena observar con atención:

Fauna

• Mamíferos: vizcachas, zorros, tarucas y ciervo andino; ocasionalmente puma y gato andino.

Flora

• Matorrales y arbustos propios de los Andes altos.
• Bofedales: humedales altoandinos que constituyen importantes reservas de agua y pastos.
• Pastos de altura: Hiru Ichu y otros gramíneos de la puna.
• Matorrales: thola, además de bosques de queñua y árboles como colle blanco y colle negro.

Aves

• Zambullidor endémico (Keñola): ave buceadora que habita en las lagunas altoandinas.
• Otras especies: choka, tikicho, y ocasionalmente cóndores, parihuanas (flamencos), patos silvestres y águilas.

La combinación de lagunas, afloramientos rocosos y pastizales hace de Pitumarka un excelente lugar de observación para fauna y avifauna altoandina.

Cómo llegar al sitio arqueológico de Pitumarka y Pukara

El acceso se realiza desde Puno, pasando por Juliaca y Macusani, hasta el distrito de Ayapata y luego hacia la comunidad de Ccochahuma.

De Puno a Macusani

• Puno – Juliaca: desde el terminal terrestre interprovincial de Puno en minibús público hacia Juliaca (aprox. 45 km, alrededor de 1 hora, carretera asfaltada).
• Juliaca – Macusani: desde el terminal privado, en combis/minibuses hacia Macusani hasta llegar al terminal terrestre interprovincial de Macusani (aprox. 210 km, unas 3 horas, carretera asfaltada).

Macusani – Ayapata – Ccochahuma

• Macusani – desvío a Ituata: en combi por la Interoceánica en dirección a Ayapata/Ituata hasta el desvío (aprox. 28 km, unos 35 minutos, carretera afirmada).
• Desvío – Ayapata: continuar en combi hasta el paradero de Ayapata, frente al mercado (aprox. 26 km, alrededor de 45 minutos, carretera afirmada).
• Ayapata – mirador de Pitumarka (Ccochahuma): en camioneta 4×4 por una trocha carrozable hasta el mirador del sitio arqueológico de Pitumarka en la comunidad de Ccochahuma (aprox. 12 km, unos 25 minutos).

Último tramo a pie

• Mirador – sitio arqueológico de Pitumarka – Pukara: a pie por un sendero altoandino bordeando la laguna y ascendiendo hasta el poblado (aprox. 1,5 km, unos 20 minutos).

La caminata es corta, pero se siente debido a la altitud y al terreno; caminar despacio y hacer pausas ayuda a la aclimatación.

Mejor época para viajar y horarios de visita

El sitio arqueológico de Pitumarka y la necrópolis de Pukara pueden visitarse todo el año. El clima es típicamente altoandino, con fuerte radiación solar durante el día, noches frías y cambios repentinos de tiempo.

Horarios recomendados

• Periodo de visita: todo el año, con especial precaución en la temporada de lluvias (aproximadamente de noviembre a marzo).
• Horario recomendado: de 06:00 a 17:00 h, preferentemente por la mañana.

Actividades para visitantes

Pitumarka y Pukara son ideales para viajeros que desean combinar arqueología, paisaje y trekking.

Cultura, investigación y fotografía

• Fotografía y filmación: asentamiento sobre el espolón rocoso, lagunas, terrazas y chullpas ofrecen motivos impactantes.
• Estudios e investigación: adecuados para análisis de estructuras de asentamiento, jerarquía social (sectores A–F), arte rupestre y tradiciones funerarias (Pukara).
• Rituales y cultura andina: según el calendario festivo, en la región pueden presenciarse ceremonias tradicionales y actividades artísticas (danza, música, artes plásticas).

Trekking y camping

• Caminata / trekking: un ascenso corto pero gratificante desde el mirador hasta el poblado; para senderistas experimentados, Pitumarka puede integrarse en recorridos más largos alrededor de Ayapata y Carabaya.
• Camping: con el equipo adecuado, es posible pernoctar en la zona altoandina, siempre en coordinación con las comunidades locales y respetando el frágil entorno natural.

Consejos prácticos para la visita a Pitumarka y Pukara

• Altitud: a más de 4.000 m es imprescindible adaptarse a la altura: caminar despacio, beber mucha agua y, si es posible, aclimatarse previamente en Puno, Juliaca o Macusani.
• Equipamiento: botas de trekking resistentes, ropa de abrigo por capas, protección contra viento y lluvia, protección solar (sombrero, gafas, bloqueador solar) y, si se desea, bastones de caminata.
• Respeto por el sitio: no subir ni dañar muros, terrazas o chullpas; no retirar piedras ni objetos; no dejar basura.
• Acompañamiento local: un guía de la zona ayuda con la orientación, la información de contexto y el respeto a los lugares sagrados.
• Seguridad: observar el tiempo, tomar en serio las tormentas y los vientos fuertes, y no internarse solo en áreas apartadas.

Quien visita el sitio arqueológico de Pitumarka y la necrópolis de Pukara entra en un paisaje urbano altoandino en el que calles, barrios, arte rupestre y torres funerarias se leen como un libro de piedra abierto sobre la historia de Carabaya.

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