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Sitio arqueológico de Wat’amarka – chullpas sobre el valle de Coasa

Miradas a un santuario andino escondido

El sitio arqueológico de Wat’amarka se encuentra a tan solo 3 km de la comunidad andina de Esquena, en la provincia de Carabaya, región Puno. A una altitud media de unos 3.678 m, este conjunto histórico se alza en el piso ecológico de la Suni, una región ruda y ventosa donde el paisaje está dominado por terrazas agrícolas, afloramientos rocosos y un cielo inmenso.

A pesar del clima seco y frío-húmedo, con temperaturas que a lo largo del año oscilan aproximadamente entre -3 °C y 13 °C, Wat’amarka fue durante siglos un importante lugar ritual. La combinación de una vista espectacular, chullpas (torres funerarias) bien conservadas y terrazas agrícolas convierte a este sitio en un extraordinario atractivo para viajeros interesados en la cultura, la historia y la arquitectura de los Andes.

Ubicación, paisaje y clima en Wat’amarka

Wat’amarka se ubica en las partes altas y en las laderas del cerro del mismo nombre, por encima de la comunidad de Esquena. Desde allí se abre la vista sobre valles, cursos de agua y las extensas planicies altoandinas de Carabaya: un panorama ideal para contemplar el paisaje andino.

• Región: provincia de Carabaya, región Puno, sur del Perú
• Altitud: aprox. 3.678 m s. n. m.
• Piso geográfico: Suni – media altura andina con laderas empinadas
• Clima: seco-húmedo, noches frías, días frescos
• Temperaturas: aproximadamente de -3 °C a 13 °C a lo largo del año

Las condiciones climáticas han marcado la forma de construir y de utilizar el territorio: arquitectura en piedra, andenes (terrazas agrícolas) cuidadosamente trazados y un manejo sofisticado de las pendientes dan testimonio de la capacidad de adaptación de las antiguas culturas altoandinas.

Historia e importancia cultural del sitio arqueológico

Wat’amarka es considerado un centro arqueológico y ritual, estrechamente vinculado a los cultos funerarios y de ancestros de la región de Carabaya. El conjunto se organiza en torno a un grupo de chullpas, en las cuales se enterraba a miembros de familias de alto estatus o personajes importantes de la comunidad.

La ubicación elevada en la cima, la orientación de las torres y el área ceremonial contigua indican que Wat’amarka no fue simplemente un cementerio, sino un espacio sagrado para la realización de rituales. La cercanía a la actual comunidad de Esquena muestra, además, cómo tradiciones antiguas y formas de vida modernas siguen estrechamente entrelazadas.

Arquitectura de las chullpas y estructura del sitio

El área arqueológica de Wat’amarka presenta una compleja arquitectura andina, que combina magistralmente el uso de piedra, barro y relieve escarpado. Las construcciones se distribuyen tanto en la parte alta del cerro como en sus laderas y están protegidas y enmarcadas por terrazas agrícolas.

Chullpas – las torres funerarias de Wat’amarka

En el centro del sitio se encuentran varias chullpas, o torres funerarias, construidas con distintas formas:

• torres de planta circular y cuadrangular
• cimientos y muros de mampostería de piedra, unidos con mortero de barro
• techumbres de lajas de piedra fijadas con mortero
• muros exteriores revocados con barro, en algunos casos con restos de pintura roja y blanca

En total se han identificado en Wat’amarka alrededor de 13 chullpas, complementadas por una estructura singular, superpuesta, de forma casi piramidal. Esta chullpa destaca por:

• aleros del techo que sobresalen unos 15 cm por fuera del muro
• una silueta piramidal de aproximadamente 2,5 m de altura
• un segundo nivel algo más pequeño formado por lajas alargadas de pizarra dispuestas en voladizo

Estos detalles arquitectónicos ponen de manifiesto la alta exigencia técnica y simbólica de los constructores, que buscaban dotar a sus torres funerarias de estabilidad y, al mismo tiempo, de una presencia representativa en el paisaje.

Terrazas y espacios ceremoniales

Todo el sitio está rodeado de andenes, terrazas escalonadas que no solo servían para la agricultura, sino que también estabilizaban la ladera y protegían la zona sagrada de la erosión.

Cerca del grupo de chullpas se encuentra además una plaza rectangular, delimitada por lajas de piedra clavadas verticalmente en el suelo. Esta plaza se sitúa sobre un terraplén artificial y conforma un espacio ritual claramente definido.

Con gran probabilidad, este espacio “cercado” servía para la realización de rituales funerarios y ceremonias conmemorativas, en las que la comunidad renovaba su vínculo con los ancestros.

Cultura, rituales y tradiciones vivas

El sitio arqueológico de Wat’amarka no es solo un testimonio silencioso de culturas pasadas, sino parte de una cultura andina viva, donde tradiciones antiguas y nuevas se entrelazan. Hasta hoy se practican aquí rituales y fiestas comunitarias.

Rituales y tradiciones místicas

• Rituales en honor a los ancestros: el lugar se utiliza para ceremonias dedicadas a los ancestros y a los espíritus tutelares (Apus) de la región.
• Wat’amarka Raymi: festival con danzas tradicionales que se celebra cada año con motivo del Año Nuevo Andino.
• Ceremonias místicas: ofrendas (despachos), música y danza enlazan simbólicamente a la comunidad con el paisaje y su historia.

Estas festividades y rituales convierten el sitio en un destino ideal para quienes desean no solo ver piedras y muros, sino vivir de cerca la cultura, el folclore y la espiritualidad andina.

Actividades para visitantes en Wat’amarka

El sitio arqueológico ofrece diversas actividades que pueden combinarse fácilmente con una visita a la región de Carabaya:

• Fotografía y filmación: la dramática escenografía altoandina, las chullpas y las terrazas brindan motivos espectaculares.
• Observación del paisaje: lugar ideal para apreciar el paisaje típico de la zona Suni y observar el uso agrícola del territorio.
• Estudios e investigación: para interesados en arqueología, historia o antropología, Wat’amarka funciona como un pequeño laboratorio de campo.
• Eventos culturales: participación u observación del Wat’amarka Raymi y otras fiestas tradicionales, siempre que se coordinen fechas y accesos.

Cómo llegar al sitio arqueológico de Wat’amarka

El acceso a este atractivo arqueológico se realiza a través de la provincia de Carabaya, en la región Puno. Los últimos kilómetros atraviesan comunidades rurales de altura, por lo que se recomienda un vehículo con buena altura al suelo.

Ruta recomendada vía Coasa y Esquena

El recorrido se realiza en varias etapas, mayormente por carreteras asfaltadas, con un corto tramo de vía afirmada:

• Terminal de Miraflores (Macusani) – desvío Ajoyani/Coasa
  Medio de transporte recomendado: camioneta doble cabina 4×4
  Tipo de vía: asfaltada
  Distancia/tiempo: aprox. 34 km / 40 minutos
• Desvío Ajoyani/Coasa – Plaza principal de Coasa
  Medio de transporte: camioneta doble cabina
  Tipo de vía: asfaltada
  Distancia/tiempo: aprox. 52 km / 1 h 15 min
• Plaza principal de Coasa – centro poblado de Esquena
  Medio de transporte: camioneta doble cabina
  Tipo de vía: asfaltada
  Distancia/tiempo: aprox. 22,5 km / 40 minutos
• Esquena – sitio arqueológico de Wat’amarka
  Medio de transporte: camioneta doble cabina o transporte local
  Tipo de vía: carretera afirmada (trocha carrozable)
  Distancia/tiempo: aprox. 4 km / 10 minutos

Según la época del año y las condiciones climáticas, los tiempos de viaje pueden variar ligeramente. Se recomienda consultar en Coasa o Esquena sobre el estado actual de los caminos y la disponibilidad de guías locales.

Mejor época para viajar, horarios de visita y consejos prácticos

El sitio arqueológico de Wat’amarka puede visitarse en principio durante todo el año. Debido al clima de altura, los visitantes deben estar preparados para una fuerte radiación solar durante el día y noches muy frías.

Horarios y momentos recomendados de visita

• Periodo de visita: todo el año
• Horario recomendado: aproximadamente de 07:00 a 15:00 h
• Nota: las tardes suelen ser más inestables; las visitas matutinas ofrecen, por lo general, mejor visibilidad y mejores condiciones de luz para la fotografía.

Consejos para una visita responsable

• Llevar ropa abrigadora en capas, protección solar (sombrero, bloqueador) y suficiente agua.
• Mostrar respeto hacia los usos y rituales locales: fotografiar o filmar ceremonias solo con permiso.
• No subir sobre chullpas, muros ni terrazas para evitar dañar las estructuras.
• Si es posible, contratar guías locales, que aportan información valiosa sobre la historia, la cultura y el significado de Wat’amarka.

Por su combinación de arquitectura arqueológica, cultura andina viva y un impresionante paisaje de alta montaña, Wat’amarka es un destino que permite al visitante sumergirse profundamente en la historia cultural de la región de Carabaya.

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